A una estación. El Otoño
sobrevivió en tu ausencia. En su adiós llovizna y se lamenta manifestando una
tristeza carente de esperas.
Noche de narices y hocicos fríos.
De ciudad gris.
A través del ventanal se oyen
sordas bocinas.
Mundillos mojados y enjuagados
tal vez;
cuando no enfadados o al revés.
Paraguas y tapados trajinan las
veredas.
Zapatos des-suelados estornudan
salpicando hasta las muelas.
-El Mundo se nos está descociendo
por todas partes"!!!
-A subir las ventanillas!!! - gritan
los de adentro-.
- Hasta los bolsillos
empapados!!! (maldicen los de afuera)
Y ni hablar del honor
Ése...! En qué charco se quedó?
Por acá todo sigue igual.
Aunque sin vos.
Que ya no es igual.
Abrazo invernal.